Crónica de Ivanna Vallespín en El País, 19/06/2014.
Reducir casi a la mitad el número de facultades y departamentos. Es la medida principal del proyecto de reforma de la estructura que ultima la Universidad de Barcelona (UB). Un plan que pretende dejar la gran estructura del mayor campus público catalán en 10 facultades y 55 departamentos. Actualmente tiene 18 y 106, respectivamente. También busca acabar con las “bolsas de ineficiencia”, las “duplicidades” y hacer las facultades más fuertes y competitivas, según justifica el documento de 115 páginas al que ha tenido acceso EL PAÍS.
El conjunto de medidas aspira a lograr nueve millones anuales para la UB entre los ahorros a obtener y el aumento de los ingresos previsto, aunque el campus asume que en los tres primeros años deberá cargar con un coste total de 13 millones por la aplicación de las medidas, básicamente el traslado de facultades.
El gobierno del campus asegura que la reforma “en ningún caso prevé ninguna reducción de plantilla y tiene como objetivo mejorar la situación del personal administrativo”. El proyecto contempla recolocar el personal administrativo en ámbitos estratégicos que se quieren reforzar, como la captación de alumnado extranjero y de recursos para la investigación.
Las medidas incluidas en el plan prevén fusionar las facultades de Odontología y Enfermería, Matemáticas con Física, Filosofía con Filología, Bellas Artes con Biblioteconomía y Geología con Biología. Aplicar estas medidas obligará a trasladar las aulas de Matemáticas, Filosofía y Biblioteconomía a las facultades de acogida. Con el cambio se busca hacer una “distribución de la actividad mucho más proporcionada y equilibrada”, ya que una auditoría interna ha detectado grandes diferencias de tamaños entre las facultades: “La más grande representa 12 veces la más pequeña”.
La reforma, que el rector presentó ayer a los decanos, prevé un ahorro de 620.000 euros por la reducción del gasto y de los complementos académicos de los docentes, y por la eliminación de las duplicidades. También se contempla un aumento de los ingresos captando alumnos extranjeros —unos 720 anuales, lo que supondrá 2,7 millones—, logrando nuevos fondos para la investigación —2,4 millones— y el alquiler de instalaciones, entre otros.
La UB también calcula que dispondrá de unas 40.000 horas (845.000 euros) del conjunto de profesores que hasta ahora dedicaban parte de su jornada a tareas de gestión por tener algún cargo, pero que ahora podrán aumentar su dedicación a la docencia o a la investigación.
El campus tiene previsto abrir hoy en su web un espacio monográfico sobre la reforma de su estructura y llevar el segundo borrador —con las aportaciones de la comunidad universitaria— a su aprobación en octubre. Antes, el 7 de julio, trabajadores y estudiantes han forzado la celebración de un Claustro para debatir la reforma, que tardaría dos cursos en implantarse completamente.
Gracias por compartir la información, no tenía noticias de esta situación y de estos planes de futuro. Lo comparto con mis círculos que a buen seguro les interesa mucho el asunto.
Gracias de nuevo y que paséis un buen día 🙂
Diana.