Tenemos el honor de invitarles al LIII Congreso de Filosofía Joven (2016): “Lógicas del presente”, que se celebrará en Salamanca los 4, 5 y 6 de mayo del presente año.
El plazo para el envío de resúmenes de propuestas se ha ampliado. El nuevo plazo, a modo de última llamada o convocatoria, vence el próximo 28 de enero, coincidiendo con el día de Santo Tomás de Aquino.de 2016,
Aquí les presentamos tres pensamientos sobre la temática del Congreso:
Filosofía de tentativas
Filosofía joven es aquella forma de pensamiento que recoge el guante que le lanza la actualidad y, equipada con las herramientas que ha legado la tradición filosófica, se arriesga a ofrecer propuestas para comprenderla aunque sea de manera efímera y provisional. Una postura tan atrevida solo puede llevarse a cabo si se asume la imposibilidad de apresar en una respuesta definitiva el presente que a cada momento se nos escapa. En este sentido, la filosofía joven es una filosofía de tentativas, de exposiciones parciales de algunos de los fenómenos de nuestra realidad. Estas aproximaciones sirven para estimular el debate de cara a que sea posible contar con la mayor cantidad de puntos de vista. Al fin y al cabo, todos estamos legitimados para pensar nuestro presente.
¿Del presente?
Un Congreso dedicado a las «Lógicas del presente» puede ser entendido al menos como una doble tarea, entrelazada en torno a los dos sentidos del genitivo. Así, por un lado, en primer lugar, reconoceríamos que nuestro presente, nuestra época, está constituida o circulada por un conjunto (desigual, complejo y no siempre consciente) de lenguajes y racionalidades. Por otro lado, en segundo lugar, también estaríamos reconociendo que no todo lenguaje y racionalidad atienden por esencia al presente, sino que cabe distinguir entre lógicas que se asientan en él, y otras que no lo hacen.
Consecuentemente, aquí ha de alojarse un interrogante ineludible: ¿cuáles de las racionalidades actuales se instalan de veras en nuestro presente? (Cuyo pregunta-reverso sería, obviamente: ¿y cuáles no se instalan?). La malicia de ese “de veras” es difícil de disimular, ya que a su vez hemos de preguntar: ¿en qué estriba instalarse ―e incluso, instalarse “de veras”― en el presente? “Instalarse” puede significar ‘comprometerse’, pero también puede significar sencillamente un neutral ‘describir’ o incluso un mero ‘yacer’ y ‘recostarse’. A lo que hay que añadir la peligrosa indiferencia que puede haber entre esos tres significados. El pensamiento postmoderno ha enseñado, con honestidad, mucho a tal respecto.
La duplicidad del genitivo nos pone además ante otro nuevo problema: ¿quién “da” las lógicas del presente? ¿El sujeto (en tanto que máquina de lógicas, en tanto que animal lógico), o el presente (el tiempo, el ser, la historia)? Y yendo más lejos, en su caso, respectivamente: ¿qué “sujetos”? ¿Qué “presente”?
¿Lógicas?
Llega a ser necesario rememorar que «Lógicas del presente» no puede dejar de aludir al problema del «lógos del presente». Dicho de otra manera: conviene recordar la plurivocidad y riqueza semántica del λόγος griego, que no solamente tiene que ver con la lógica en un sentido moderno (ciencia lógica, lógica matemática, lógicas formales, etc.), ni tampoco solamente con las comunes acepciones a las que se asocia: ciencia, racionalidad, estudio,… Sino que además, y en origen, λόγος tiene que ver con el lenguaje, la palabra, el habla, el diálogo, el dicho común y el rumor; con la ley, la normatividad, el nomos, la negociación y el trato; con el pensamiento, la inteligencia, lo espiritual, el noûs y el preguntar; con el relato, la narración, la historia, el contar y el cuento; y también ―y tal vez en resumen― con el enlace, el nexo, la relación y el lazo.
Toda la información en https://53congresofilosofiajovensalamanca.wordpress.com