DECLARACIÓN DE LA ASAMBLEA DEL PROFESORADO EN DEFENSA DE LA FILOSOFÍA
Ante las sorprendentes noticias que se han venido produciendo estos días con respecto a la no aparición del Decreto Autonómico de secundaria y bachillerato para el curso 2017-2018, La Asamblea del profesorado de filosofía de la Comunitat Valenciana desea manifestar lo siguiente:
La situación de la filosofía en nuestra Autonomía se encuentra en un estado deplorable. Al inmodificado Decreto de la anterior Administración, se suman unas ponderaciones para las Pruebas de Acceso a la Universidad incomprensibles para la asignatura de Historia de la filosofía. Esto traerá como consecuencia la práctica desaparición de los estudios de filosofía en segundo de bachillerato. La repercusión en nuestra Universidad asimismo puede ser desastrosa. La inaceptable demora del Decreto puede suponer una herida mortal a una de las Facultades más importantes de España, debido a la falta de alumnado.
Es tarea de la Conselleria d´Educació, el facilitar y contribuir a mejorar la vida y futuro de los estudiantes de nuestra Comunidad y de quienes trabajamos para ello. Tanto aquí como en el resto de España, los y las responsables educativos parecen haberse dado cuenta de que es un error reducir la presencia de la Filosofia, incluso han comprendido que es un acierto ampliar dicha presencia. Un buen Gobierno debería preferir acertar, actuar para mejorar aquello que le compete. Y está en sus manos hacerlo. En este caso poder es deber.
Sabemos que el Decreto está preparado y cumple con las peticiones y expectativas de los y las profesionales de la filosofía y en última y mayor instancia, de la educación, lo cual agradecemos. La filosofía ha de ser considerada una de las disciplinas educativas más relevantes, por tradición y función. Una educación sin filosofía corre el riesgo de perder la visión crítica de la realidad y carecer del planteamiento de los puntos trascendentales de la existencia humana, así como de los aspectos éticos y sociales que atañen a la convivencia. No podemos pasar por alto la importancia radical que tiene la filosofía en la conformación de la cultura occidental en lo que esta tiene de científica, ilustrada y democrática. Una administración que dice preocuparse por la educación, y que de hecho hasta hace poco lo había demostrado reuniéndose con nosotros y escuchándonos, no puede permitirse cercenarla.
Por ello, no parece coherente enviar mensajes o hacer promesas desde la Administración educativa a la ciudadanía que luego no van a cumplirse en tiempo y forma. En este sentido, tanto los avisos por parte de Secretario autonómico en julio de 2016, que nos confirmó personalmente que se trabajaba en un Decreto para el próximo curso, como los del Conseller, que tanto en octubre de 2016 como en abril de 2017 reiteró que se estaba trabajando en ese Decreto y con especial mención al blindaje de la filosofía, se han mostrado como promesas intempestivas y vanas en estos últimos días.
Debemos invocar la inteligencia prudente que nos enseñaron los griegos. Combinemos serenidad y lucha para que nuestras autoridades se reafirmen en sus promesas y para que el error quede oficialmente sustituido por el acierto. Afortunadamente para la comunidad educativa valenciana hay quien tiene ese poder. Esperemos que la Consellería de Educación use ese poder (el que la ciudadanía les ha otorgado) para mejorar las cosas.
Pedimos por tanto a la Administración Educativa, que publique el Decreto para el curso 2017-2018, y que sobre todo enmiende las dañinas ponderaciones para Historia de la filosofía. Esta asignatura nunca debió salir de la fase general, pero dado que ha sido así, reclamamos una ponderación coherente, es decir, máxima para todos y cada uno de los estudios universitarios.