Ursula von der Leyen, presidenta de la Comisión Europea, afirma que es necesario introducir nuevas medidas que permitan alcanzar los objetivos marcados (un 55% de reducción respecto a 1990 en 2030).
Este reconocimiento por parte de von der Leyden se une a la reclamación, por parte del Parlamento Europeo, de aumentar los objetivos de reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero hasta el 60%.
Si es muy importante reducir la emisión de esos gases para salvar el planeta entero: la fauna y las nuevas generaciones futuras de humanos.