Crónica de M. Planelles y J. A. Aunión en El País, 08/12/2013.
- Castilla-La Mancha, Ministerio de Educación y Cataluña encabezan el ajuste
- La inversión pública escolar se ha reducido un 16,7% en cuatro años
- Educación pide a las autonomías que doblen los recortes ya hechos
- Wert: “Esta ley, si funciona, va a ser cara”
Todas las Administraciones sin excepción han metido la tijera en el gasto en escuelas y universidades. Y, a pesar de que el ritmo de descenso se ha ralentizado, el recorte desde 2010 alcanzará los 7.298 millones de euros en 2014; lo que supone una caída del 16,7% en el gasto educativo durante la crisis. El tijeretazo equivaldría a haber eliminado de un plumazo todo el sistema educativo andaluz, donde estudian alrededor del 20% de los alumnos de todo el país, según los datos de los proyectos de presupuesto de las autonomías para 2014 (pendientes aún de aprobación) recabados por el gabinete de estudios de la Federación de Enseñanza de CC OO. Según los mismos, Castilla-La Mancha (con un 31,1% de reducción desde 2010), el Ministerio de Educación (-30,4%) y Cataluña (-24%) encabezan el ranking de los recortes.
Para el próximo año se esperan 536,6 millones de recorte adicional, un ajuste menor que el de años anteriores: en 2011 fue de 2.395 millones; en 2012, 1.615, y en 2013, otros 2.750. El primer gran mordisco a la educación se lo dio el anterior Ejecutivo del PSOE en mayo de 2010, con la bajada de sueldo a los docentes del 5%. Después, las autonomías, unas más que otras, fueron eliminando planes de infraestructuras, reduciendo becas de transporte, el dinero para la formación del profesorado, los gastos corrientes de los centros…
Fuente: CC OO / EL PAÍS
Pero a los responsables políticos no les parecía suficiente, y tras la promesa a Bruselas por parte del Gobierno de hacer un recorte adicional de 3.000 millones de euros, el Ministerio de Educación aprobó un real decreto que empujaba a las comunidades que aún se estaban resistiendo a hacer lo que ya habían hecho muchas: reducir drásticamente la plantilla de profesores, ya que entre el 70% y el 75% del gasto de las 17 consejerías corresponde al de personal. ¿Cómo? Aumentando las horas de clase que dan los docentes, reduciendo la cobertura de bajas o aumentando el número máximo de alumnos por clase. Así, el descenso en más de 20.000 docentes en la escuela pública (hasta el curso pasado), ha provocado, sobre todo, la eliminación de apoyos y programas para los alumnos con dificultades.
“Los primeros años podían decir que había grasa, pero ya cualquier recorte que se haga afecta al músculo de la educación”, apunta José Blanco, responsable de enseñanza en Andalucía de CC OO. Poco a poco, las comunidades han ido eliminando ayudas para libros de texto, servicios gratuitos de comedor, programas de implantación tecnológica… El margen de recorte que queda ya es muy estrecho. Sobre todo, porque el alumnado ha seguido creciendo en este tiempo de ajustes: en el curso 2013-2014 hay al menos medio millón de estudiantes más que en 2009-2010 (sumando educación no universitaria y universitaria).
Muchas comunidades prevén, incluso, una leve subida de las partidas educativas en 2014. Por ejemplo, en Baleares está tendrá 15 millones más que en 2013 (un 2,17% más). Sin embargo, si se compara con las cuentas de 2010, se aprecia un recorte global de 52 millones (un 6,6%). La gran mayoría de las comunidades —salvo Andalucía, Castilla-La Mancha, Cataluña, Galicia, Murcia y País Vasco— tienen previsto incrementar el gasto el próximo año. Pero, según resalta CC OO, ese aumento de 142,6 millones no consigue compensar la reducción del resto y, sobre todo, el ajuste anterior.
El mayor incremento para 2014 es el del Ministerio de Educación. El departamento de José Ignacio Wert gastará 205 millones más, lo que supone una subida del 10,5% respecto a este ejercicio, por el aumento del presupuesto para becas. Sin embargo, en las cuentas de 2014 no existe “ninguna previsión específica de financiación vinculada” a la recién aprobada Ley Orgánica para la Mejora de la Calidad Educativa (LOMCE), insiste CC OO; tampoco aparece en las cuentas de la mayoría de autonomías. Algunas de ellas y el Consejo Escolar del Estado han dudado de que esta norma cuente con financiación suficiente para su implantación.
Pero a pesar del aumento, el departamento de Wert ha sido uno de los más aplicados a la hora de meter la tijera. Ha recortado más de 942 millones desde 2010, un 30%. Eso ha supuesto la eliminación de prácticamente todos los programas de colaboración que tenía con las comunidades, como el de los libros de texto (un millón de alumnos las han perdido) o el de nuevas tecnologías. Castilla-La Mancha, por su parte, es la que encabeza el recorte de profesorado en dos cursos: se han perdido 4.500 docentes en la pública (hay un 14% menos), según los datos del ministerio.
La promesa a Bruselas se desvanece
La protesta educativa cobró una enorme fuerza con el decreto de recortes del Gobierno de mediados de 2012, con varias huelgas unitarias de todo el sector. Aunque el frente contra la reforma educativa (LOMCE) que acaba de aprobar el Congreso también le dio fuerza, una de las espitas importantes para la movilización fue la promesa del Ejecutivo de Mariano Rajoy a Bruselas en abril de 2012 de una bajada de un punto del PIB en la inversión pública en educación entre 2010 y 2015 (del 4,9% al 3,9%). Esto es, un recorte de unos 10.000 millones en cinco años.
Sin embargo, ahora, a la luz de los proyectos de Presupuestos para 2014, que anuncian un recorte acumulado desde 2010 de 7.298 millones, parece muy difícil que vaya a cumplirse esa promesa, pues significaría aplicar en un solo año un gran tijeretazo en un sistema que, según la mayoría de especialistas, ya está en los huesos. Y, teniendo en cuenta, además, que la aplicación de la nueva ley educativa supondrá un gasto extra de al menos 400 millones de euros y que a la vuelta de la esquina están las elecciones en buena parte de comunidades y las generales a finales de 2015. “Si no se cumplen [las previsiones de recorte enviadas a Bruselas] y esto es más caro, será porque habremos conseguido una reducción del abandono escolar temprano”, dijo el ministro José Ignacio Wert a este periódico en una entrevista el pasado octubre.